Cuando veo un anime que me gusta lo intento compartir con todos, este en especial se lo he recomendado a Alucard, que sabia perfectamente que podria gustarle igual que a mi, ya que el tambien ha pasado por una situacion parecida, nos hemos identificado con la trama.
Pero ahora quiero compartirla con todos.. ojala se animen a verla.
Título: 5 centímetros por segundo / Director: Makoto Shinkai Género: Drama / País: Japón Año: 2007 / Duración: 62 min. NOTA FINAL: 9
La historia narra la separación de Thono Takaki de su amiga Shinohara Akari después de su graduación en la escuela primaria. Aunque se sienten lejos, siguen teniendo relación. Un día, Takaki decide tomar la iniciativa, y va al encuentro de su añorada amiga en pleno invierno
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Aquello que nunca te dijeHoy voy a tocar un tema del que no había hablado hasta ahora. Voy a hablar de sentimientos, de amor. Pero no os asustéis, no voy a aburriros con cursilerías. Porque, como sabemos aquellos que lo hemos vivido, en el amor no es todo de color de rosa. Su lado oscuro esta lleno de dolor, de angustia, de soledad.
Me enteré de la existencia de esta peli por una preciosa canción “One more time, one more chance”, de Yamazaki Masayoshi, que recomiendo encarecidamente que escuchéis. La verdad es que le viene como anillo al dedo a la peli, conteniendo casi toda su esencia (
Aquí podéis verla con subtítulos en español y con escenas de la película).
- “¿Sabes? Escuché que son 5 centímetros por segundo”
- “¿El que?”
- “La velocidad con la que caen los pétalos de la flor de cerezo, son 5 centímetros por segundo. ¿No crees que se parece un poco… a la nieve?”
Como veis por la nota que le he dado, a mi me ha gustado mucho, muchísimo. La recomiendo totalmente. Aunque es un drama, no se hace
cursi ni pesada en ningún momento. Ademas dura muy poquito, casi una hora justa, por lo que no se tarda mucho tiempo en verla.
En resumidas cuentas, una gran película que nos muestra como evoluciona una historia de amor a traves de los años (esta dividida en tres capítulos, separados cronológicamente por grandes lapsos de tiempo) y que nos enseña que no todos los romances son para siempre. Espero de verdad que os guste.
No te quedes con la duda, ni las ganas!!! Podes descargarla desde
aquiAdvertencia: la siguiente sección contiene detalles de la trama y el argumento
Primer capítulo: El pétalo escogido
Japón, mediados de la década de los 90. Thono Takaki es un alumno de una escuela primaria en Tokio. Un día, transfieren a su clase a una chica llamada Shinohara Akari.
Takaki y Akari se convierten en grandes amigos
Poco a poco, debido a que ambos enferman con facilidad y pasan bastante tiempo en la biblioteca, se hacen muy amigos. Aunque sus compañeros se meten con ellos, no les importa: tienen planeado ir a la misma escuela secundaria, y estar juntos para siempre.
Pero un tiempo después Akari tiene que irse a vivir a otra ciudad, muy lejos de Tokio. Este hecho deja a Takaki bastante trastornado, siendo su despedida algo fría y distante. Unos meses después, vuelven a retomar su relación, esta vez por carta. Pero esta vez, es Takaki el que tiene que irse a vivir a otra ciudad, quedando mucho mas lejos de Akari que hasta ahora.
Por eso, antes de la mudanza de Takaki, éste decide ir a ver a su amiga, quizá por última vez, y decirle todo lo que siente por ella y no le pudo decir el día de su despedida. Planea todo el viaje en tren: saliendo de la escuela a las 16:00, puede verse con Akari a las 19:00. Akari promete ser puntual y estar a esa hora en la estación, pero esa tarde cae una gran tormenta de nieve, retrasando la circulación de trenes varias horas.
Takaki mira el reloj, nervioso por la idea de llegar tarde a su cita
Cuando finalmente Takaki llega a la estación son las 23:15 de la noche. Mas de cuatro horas han pasado ya desde la hora de su cita, y se siente hundido y solo al pensar que tal vez ya nunca podrá volver a ver a su amiga. Pero cuando entra en la estación ve una figura acurrucada frente a la estufa. Traga saliva y se acerca… sí, es Akari.
Le ha estado esperando como prometió, y al verle no puede reprimir una lágrima por la angustia que la había embargado hasta ese momento. Exactamente la misma que había pasado Takaki momentos antes.
De camino a casa de Akari, encuentran un árbol de cerezo. La nieve cae suavemente, recordándoles los pétalos que miraban caer años atrás, cuando los dos vivían en Tokio. Ambos se miran, y se besan por primera vez.
Ambos recordarán este momento durante toda su vida
A la mañana siguiente, después de hablar toda la noche y caer dormidos sin darse cuenta, se despiden. Pero, una vez mas, Takaki no tiene valor para decirle lo que siente realmente. Tampoco Akari, que incluso le ha escrito una carta, pero no se atreve a dársela.
Segundo capítulo: Cosmonauta
1999. Varios años han pasado ya desde el ultimo encuentro de Takaki y Akari. Ahora él vive en Kagoshima, isla de Japón desde donde se lanzan cohetes espaciales.
Pero este capítulo esta contado desde la perspectiva de una tercera persona, Kanae, una chica del mismo instituto de Takaki, y que esta enamorada de él.
Kanae tiene que decidir a que universidad va a ir, pero es muy indecisa. Solo sabe que le gustaría estar siempre junto a Takaki, porque es feliz solo con verle, pero ese pensamiento también le produce mucho miedo. Mientras, Takaki siempre parece distante, como queriendo estar en otro lugar. Siempre esta mandando mensajes de texto, y no se da cuenta de lo que siente Kanae.
Kanae esta profundamente enamorada de Takaki
Un día, Kanae reúne el valor suficiente para expresar sus sentimientos. Como todos los días, espera a que Takaki salga de clase para acompañarle a casa. En el trayecto, Kanae intenta decirle lo que siente, pero no puede y vencida por la angustia, rompe a llorar. En ese momento despega un cohete, interrumpiendo la escena. Takaki y Kanae se quedan mirando como viaja el proyectil por el cielo. En ese momento, Kanae decide que no va a decirle lo que siente.
Aquí es cuando Takaki vuelve a ser el narrador de la historia. Nos cuenta como tiene un sueño que se repite, en el que se encuentra con Akari en un prado. También nos dice que los mensajes de texto que Kanae le veía mandar, realmente no los mandaba a nadie. Solo escribía lo que sentía, los sueños que tenia… para luego no enviarlos, ni guardarlos.
Y es que Takaki se siente un poco como ese cohete espacial, cuya misión es salir del sistema solar. Se ve en un viaje yendo constantemente hacia delante, a través de la oscuridad. Un viaje lleno de soledad, basado solo en la creencia de que hay algo en el otro extremo del universo. Se pregunta hasta donde podrá llegar, teniendo esa creencia como único motivo para seguir adelante.
Esto es lo que siente Takaki, y es lo que comprende Kanae aquella tarde en la que decide no contarle sus sentimientos.
Takaki y Kanae observan como despega la sonda espacial
Tercer capítulo: Cinco centímetros por segundo
El último capítulo es el que mas desordenado está, por eso intentaré contarlo siguiendo un orden cronológico.
Año 2008. Takaki ahora vive y trabaja en Tokio, y su desazón y tristeza no hacen mas que aumentar. Para colmo de males, la chica con la que salía desde hacia tres años rompe con él por el móvil.
Takaki se siente fatal. Se siente solo, en un viaje hacia ninguna parte y buscando algo que no puede alcanzar. Por otro lado, Akari esta a punto de empezar una nueva vida. Va a casarse en poco tiempo, y, haciendo la maleta para mudarse, encuentra la carta que no tuvo el valor de darle a Takaki tantos años antes. Esto la hace tener sueños sobre el pasado.
Un día, ambos tienen el mismo sueño, en el que evocan el día de su encuentro en la estación. Los dos vuelven a tener 13 años y están en aquel amplio campo nevado. Las luces de la casa de Akari se ven a lo lejos, y se besan al lado de aquel árbol de cerezo mientras cae la nieve. Ambos recuerdan ese sueño al día siguiente, mientras suena la canción “One more time, one more chance”.
Ambos recuerdan el momento en que mas cerca estuvieron el uno del otro
En este momento se van sucediendo imágenes que explican lo que ha pasado entre los dos. Al principio, después de su encuentro, se mandaron cartas durante un tiempo. Pero llegó un día en que dejaron de escribirse, e intentaron seguir con sus vidas.
Sin embargo no fue fácil, porque durante mucho tiempo después Akari tenia sueños parecidos a los de Tataki, y como él, también escribía mensajes en el móvil para luego no enviarlos. También intentan nuevas relaciones, aunque Takaki no tiene tanta suerte porque echa demasiado de menos a Akari. Ella sin embargo logra ser fuerte y seguir adelante, hasta llegar a comprometerse en matrimonio.
Y el gran final: un mes después de romper con su novia, Takaki sale de su casa para dar un paseo. Anda distraídamente, y se cruza con Akari en el mismo paso a nivel que solían pasar cuando eran niños. Pero no la reconoce hasta pasados unos segundos, cuando se gira para mirar.
Takaki espera que pase el tren para poder ver al otro lado
En ese momento, cuando Akari parece también girarse desde el otro lado del paso a nivel, pasan dos trenes a toda velocidad. Takaki espera a que pasen los trenes, pero cuando éstos terminan de pasar ya no hay nadie. Takaki sonríe, y sigue su camino.
Conclusiones
Si os soy completamente sincero, y no tengo razón por la que no serlo, he de decir lo siguiente: si pudiera ir atrás en el tiempo, no vería esta película. Y no porque sea mala ni muchísimo menos, sino por todo lo contrario. Aunque la historia no es muy novedosa, lo importante es como se cuenta.
En este caso el director ha hecho un magnífico trabajo, exponiendo como avanza una historia de amor a través del tiempo, con grandes saltos de varios años. Siguiendo la historia podemos darnos cuenta de que hay romances que no tienen un final claro, y que éstos pueden llegar a desembocar en una soledad y una amargura terribles. Tanto, que son capaces de dañar no solo a los protagonistas sino también a la gente que los rodea.
Takaki proyecta su dolor, sin quererlo, a Kanae
La animación ofrece un vehículo extraordinario para relatar la historia. La calidad gráfica es abrumadora, ofreciendo unos paisajes tanto de la ciudad como naturales de una belleza sublime, y da una gran libertad a la hora de mostrar situaciones en las que el tiempo y el espacio no se comportan, por así decirlo, de una manera “real” (como por ejemplo en sueños, recuerdos, sensaciones de deja vu, etc.)
Y el final… la historia queda abierta, y por tanto totalmente interpretable. ¿Por qué sonríe Takaki? ¿Se alegra porque, al fin, se ha cumplido la promesa que se hicieron de niños (ver juntos como florecían los cerezos)? ¿Piensa que su imaginación le ha jugado una mala pasada, como tantas veces en el pasado? ¿O sabe que era ella realmente? En este caso, ¿Por qué no la sigue? ¿La deja marchar para que viva su vida?
En fin, que después de verla me quedó un nudo en el estómago de tamaño familiar, que aun me dura. Podéis creerme o no, pero no soy de lágrima fácil. Solo he hincado la rodilla en un puñado de ocasiones, y en ningún caso me ha durado la sensación más de unas horas.
Takaki siempre sueña que se encuentra con Akari, en un lugar idílico
Pero con esta película todo ha sido diferente. Supongo que el momento actual en mi vida, no muy afortunado, sumado a un antiguo romance, similar al que cuenta la historia (con despedida en el andén incluida) ha hecho que me identificara tanto con el protagonista que al final, hice completamente mía la historia que contaba.
Claro que no todo iba a ser cosa mía. La historia esta tan bien transmitida y ejecutada que se merece un sobresaliente como una catedral. Para terminar, dejo la traducción de la última estrofa de la canción que da vida a la película.
Si nuestras vidas pudieran empezar de nuevo,
estaría junto a ti toda mi vida,
porque no hay nada que desee más,
nada mas que estar contigo para siempre
